Trabajos con futuro

Aunque el futuro se esconde detrás de nuestra consciencia, esta es capaz de romper la barrera del presente. Las personas imaginamos escenarios posibles de futuro para prepararnos, con la idea de adaptarnos mejor al entorno.

Desde muy niños nos tenemos que ir decantando por qué tipo de formación vamos a recibir y nos interpelan por qué oficio nos gustaría tener. Demasiado pronto para poder decidir, aún así, cuando una persona tenga 14 años, no estará de más pensar qué tipos de trabajo tendrá a 30 o 40 años vista en pos de poseer una estabilidad cada vez más mermada, durante la mayor parte de tu vida laboral.

Hace 40 años en USA, existían relojes inteligentes, consolas de videojuegos, ordenadores personales, ahora tenemos los smartwatch, las consolas de videojuegos de realidad virtual y ordenadores personales de bolsillo. Por otro lado, tenemos impresoras 3D y 4D, ordenadores cuánticos, drones autónomos y robots que nos ayudan en tareas de una cierta complejidad.

La predición global se basa en que el avance tecnológico irá poco a poco robotizando los puestos de trabajo que sean tareas repetitivas y poco a poco las no tan repetitivas. Por ejemplo, una de las tareas más complejas que será sustituida en no mucho tiempo es la condución de vehículos. De esta forma, el espacio que nos dejará serán tareas relacionadas con la organización y la creación, es decir, con trabajos donde se necesite algo nuevo cada cierto tiempo.

Ahora bien, en una visión más desmenuzada, nos encontramos que la sustitución de las personas por las máquinas será progresiva y no estoy seguro de a qué nivel de complejidad, dentro de 40 años, serán sustituidos. Aún así, vamos a imaginar el trabajo a 40 años vista.

I+D

La I+D es lo único que nos puede mantener y mejorar la calidad de vida. Hay que dedicarle mucha inversión. Creadores, constructores, operarios y mantenedores de la tecnología.

Desarrolladores de software: en todos los ámbitos de la vida se necesitarán programadores, personas que dominen un ámbito determinado y sepan programar. Por ejemplo, médicos programadores, abogados programadores, docentes programadores, periodistas programadores, etc.

Inteligencia artificial: encaminada a que el robot pueda trabajar en múltiples puestos de trabajo. Esto nos creará la necesidad de regular la interacción de ella con el mundo, abogados, filósofos, legisladores, sociólogos, psicólogos, etc.

Neurociencia: el conocimiento del funcionamiento del sistema nervioso central nos dará la posibilidad de interactuar con todo y con todos. El desarrollo de las interfaces de comunicación entre las personas, la inteligencia artificial y el resto del mundo, mejorando nuestros sentidos, será un nicho de trabajo. Ingeniería de la interfaz.

Energía: la revolución energética vendrá de la mano de las energías renobables o de la fusión nuclear. A la  ingeniería, instalación y distribución de la energía se dedicarán numerosos recursos humanos para el cambio de modelo. Solo con energía barata y de bajo o nulo impacto se podrá llegar a dar la siguiente revolución.

Comunicación: la comunicación, en todos los sentidos, se hará mucho más fluida. La parcela que más demanda va a tener es el de la seguridad de la privacidad.

Atención a la persona

Salud: el gran cambio en la salud vendrá de la mano de los escaners, nanotecnologías y la genética. Probablemente, los embriones serán tratados genéticamente en sus inicios para prevenir enfermedades, si hubiera algún problema posterior, se descubriría con un escaner integral y se repararía con la nanotecnología. Nanotecnólogos, genetistas.

Psicólogos: la presión tecnológica hará que se necesiten ayudas psicológicas de adapatción cada cierto tiempo. Esto pasará hasta que se consiga alcanzar el nuevo modelo de sociedad.

Asistencia al anciano: aunque la calidad de vida se alargará y mantendrá hasta casi el último momento de la persona, no quita que necesitemos asistencia. Seremos muchos, con lo que hará falta bastante personal.

Aprendizaje: los profesores dejarán de ser transmisores de conocimientos (lo harán las máquinas) y pasarán a ser educadores. Tendrán que dedicarse al fomento y cuidado de las relaciones personales, ya que, cada vez, el trato con las máquinas será mayor y mejor, con lo que tenderemos a dejar de lado las relaciones personales.

Ocio: cada vez tendremos más tiempo fuera del trabajo, deberemos tener la cabeza ocupada, así, la diversión será uno de los sectores más amplios. Los viajes a otros países, incluso a la Luna será algo normal. El arte es la creación por excelencia y dentro del ocio será la parte que mejor aguantará el arreón tecnológico.

Cuidado del planeta

Estudio: para poder cuidar el planeta se necesitarán personas que lo estudien, geólogos; a su vez, necesitaremos personas que estudien la vida en el planeta, biólogos, sin ellos y sus derivados no sabremos cómo cuidarlo.

Reciclaje: el aumento exponencial de producción traerá la necesidad de desmontar y reciclar al 100% toda la materia que intervenga en el desarrollo, por ello, no se podrá dejar en las manos de la población la subsanación de esta necesidad y lo harán profesionales ayudados por sus respectivas máquinas.

Redución: el impacto en el ambiente será insostenible si no se le dedican recursos tecnológicos para mitigarlo al máximo. El entorno deberá ser lo más natural posible. Se necesitará mucha mente pensante para organizar la reducción.

Omito reutilización porque con el reciclaje, la reducción y la energía muy barata, no tiene sentido reparar lo usado.

Diseño

3D: la realidad virtual acabará imponiendose y todo el diseño de mundos virtuales está por hacer.



Seguro que habrá muchos mas ámbitos donde se creará trabajo, estos son los que he pensado que serán los más importantes en las próximas cuatro décadas. Lo que sucede es que solo pasará si, y solo si, el planeta lo gobiernan personas que piensan en la gran mayoría de los seres que habitamos el mundo.