La Vida es una protuberancia ordenada y casual de la
Línea del Desorden Universal (LDU). Estamos al principio de la evolución de la
Vida, nuestra Vida. Con el tiempo, esta protuberancia podrá desaparecer ya que
la LDU le alcanza o, por el contrario, eternizarse, si la Vida domina las leyes
de la Naturaleza, de forma que ya nunca le alcanzará la LDU. De esta manera,
pasaría a formar parte de un posible "club selecto de vidas" con esa
capacidad.
La Vida comienza cuando una serie de sustancias
inorgánicas alcanzan tal configuración que con ayuda de energía exterior, se
crean otras sustancias más ordenadas y/o con capacidad para seguir aumentando
su orden con cada aportación energética. Así, algo está vivo mientras, con un
aporte de energía externo, consiga mantener o aumentar su orden, ya sea en
cantidad o en calidad. El secreto de la Vida está en el Orden. Cualquier
alteración en el Orden llevará consigo otro Orden, el cual podrá ser el inicio
de un desorden, y con mucha probabilidad, morirá o por el contrario podría ser
una mejor configuración y, por lo tanto, aumentar la posibilidad de permanencia
en el tiempo. La Vida intenta vencer a la entropía, o sea, perpetuarse en el
tiempo y la estrategia que sigue es la reproducción con posibilidad de mejor
configuración o mutación de mejora. La estrategia de una piedra es ser lo más
estable posible ante el deterioro producido por la entropía, pero no se adapta,
cuando el sol se convierta en supernova terminará su existencia, mientras que
la Vida estará ya muy, muy lejos.
Fijaros que no he dicho ni dónde ni cuándo apareció, pero,
en cualquier lugar del Universo y durante los más o menos 14000 millones de
años de edad que plantean los científicos que tiene este, pudo aparecer la
Vida. En estos momentos, se invierte dinero en la búsqueda de Vida fuera de la
Tierra, luego, como mínimo, hay una cierta esperanza/posibilidad de encontrarla
y de que no seamos ni los únicos, ni los primeros. En vista de la gran cantidad
de posibilidades para que la Vida aparezca azarosamente, no creo necesario
ninguna intervención divina para la aparición de la Vida, ni para su evolución,
aunque no descarto, porque ya lo estamos haciendo, la evolución de las especies
con la intervención de otros entes. En cuanto a la creación, todavía nuestra
ciencia no tiene la información y tecnología suficientes para sacar de la nada
un ser vivo, pero yo creo que llegará.
También creo que esta idea en la que nuestra Vida no tiene nada de
extraordinario puede tener paralelismo con la idea de que el Hombre no es el
centro del universo, decepcionante para la Humanidad pero real como la Vida
misma, pudiendo llegar a producir un vuelco en nuestra civilización si en algún
momento se confirmara.
El exponente de nuestra Vida más complicado es el ser
humano, un cúmulo de materia ordenada con tal perfección que su desorden
crítico (muerte) es todavía incalculable. Desconozco si somos seres con parte
de nosotros existiendo en otras dimensiones inexplorables con la tecnología
actual, o somos la concreción de la configuración con más posibilidades de
existir, pero lo que sí que creo es que cuando mueres, no hay más allá, y que
cuando la ciencia conozca todas las dimensiones del ser humano podrá
resucitarlo y modificarlo de igual manera a como lo hacemos actualmente con
cualquier máquina, pasando a ser tan mortales como inmortales mientras haya
energía útil en el Universo. Seremos entonces otra protuberancia que se independiza de la LDU.
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